No estoy escribiendo esto como un publirreportaje
o porque sea un servicio publicitario ni nada por el estilo. He recorrido
muchos lugares del mundo y en todos he estado en concierto de Rock en Bares.
Este es el primer año en que realizamos El Monster del Rock en Ozzy, las dos
últimas ediciones se dieron en un gran escenario de la capital llamado
REVOLUTION que me encanta.
En esos trips
por el planeta conocí lugares en donde nacieron bandas que han marcado mi vida
para siempre y que están ligadas a los bares en donde tocaban, no conocí todos
los lugares, algunos sí, pero aprendí sobre los otros y si hacemos una lista,
vemos que varias de las bandas más grandes llevan inherente el nombre de su
escenario.
The Doors – El Whisky
A Go Go (Los Ángeles, California)
The Ramones – El
CBGB (New York, NY)
Tha Clash – The Casbah
(Londres, UK)
The Beatles –
The Cavern (Liverpool, UK)
Para una lista más extensa pueden ir a http://www2.gibson.com/News-Lifestyle/Features/en-us/greatest-rock-venues-1112.aspx
En fin, cuando muchos comenzamos a tocar en
la década de los noventa e incluso algunos a finales de los 80 en Colombia, no
había muchos lugares, después comenzaron a fundar pequeños “antros” de Rock,
que eran lo mejor que nos podía pasar en esta vida. Así nacieron leyendas que
ahora son urbanas como Music Factory, Rotten Ratts, Vértigo Campoelias, Barbie,
Kaliman, Transilvania, Ácido, Jeremías entre muchos otros. Ahí armábamos las
farras y los toques, eran los años duros del rock alternativo en el mundo y del
nuevo movimiento de Rock Latino, la avanzada regia en México y por supuesta
Colombia no se quedaba atrás, Bogotá vio nacer a sus mejores bandas. Los
conciertos siempre estaban llenos, estallados de gente, sensacional. Las baterías
eran baratas, ¿backline? Que es eso, tocábamos todos con amplificadores de 10
Watts y guitarras Peavey Predator y sonaba increíble. Y la gente la pasaba increíble,
en el año 95 un cover valia 10 lukas sin derecho a nada. Todo mundo lo sabía,
así era. El promedio de una botella de aguardiente era de 30 mil pesos en un
bar.
Hoy en día la cosa es diferente, antes de
nacer las bandas ya han pulido más el ego que la música, tienen guitarras
Gibson y bajos Rickenbaker, Amplificadores Orange y baterías Crush con platos
Istambul. Ya no hay “antros”, hoy hay venues con capacidad para 500 y 1000
personas, hoy existe toda la infraestructura con la que alguna vez se soñó en
los 90 cuando a las bandas nos echaban de la casa o nos mandaban la policía por
ensayar en los garajes y no en modernas salas con cabina-cabezote y aire
acondicionado.
Y sin embargo pareciera que el rock va de
culo pal estanco. ¿Por qué? He pensado esto cien veces y no le hallo más explicación
a que la música se está volviendo aburrida.
OZZY Bar le está apostando como otros lugares
a la construcción de ese rock y eso es bueno, sin sonar “lambón” les cuento a
quienes no han ido que es un “venue” excepcional, no solo porque el escenario
es un escenario de Rock, pensado para el Rock, o por sus juego de luces, o por
su sonido increíble, su backline. Sino porque quienes lo conducen son Rockers,
su dueño es Rocker, los ingenieros son Rockers, el Roadie es Rockers y en ese
lugar solo se respira Rock y del bueno.
Quise hacer esta nota, no por darle
publicidad a Ozzy porque se la merece toda, creo que ya todo el mundo lo conoce, fueron ganadores a
Mejor Bar de Rock en los Premios Subterránica 2011. Quise hacer esta nota para
decirles que en Bogotá tenemos todo, salas, instrumentos, infraestructura,
universidades y lugares maravillosos para tocar como OZZY, entonces pensemos… ¿Qué
es lo que falla? Yo tengo la respuesta identificada hace rato… ¿Qué creen
ustedes? Larga vida a OZZY BAR, un escenario del putas!!!