Una anécdota muy recordada por nosotros en Subterránica fue
la pregunta que le hicimos a Carlos Vives en New York en una de las ponencias
de LAMC (Latin American Music Conference), en el panel estaban grandes
productores y el presidente de la Academia Latina de Artes y Ciencias de la
Grabación. Lo que era una ponencia sobre Los Grammy terminó siendo casi un
soliloquio del samario por obvias razones, es un personaje muy talentoso y muy
querido por todos los latinoamericanos.
Recordando que Carlos Vives fue Rockero desde niño y que siempre
buscó su camino en el rock, incluso uno de sus primero papeles después de
Gallito Ramírez fue en una novela llamada LOCA PASION (LP) en donde
interpretaba un rockero que buscaba su camino en la industria. Me llama
poderosamente la atención de cómo después de un golpe del destino y su triunfo
con Escalona y Los Clásicos de la provincia encontró que la ruta era esa. Y él
mismo lo dijo allá, hizo lo que a la gente le gustó.
Yo noté un poco de disgusto por la pregunta pero sin embargo
el punto que expone es bastante reflexivo, aun sabiendo que Carlos Vives no se
hizo un folclorista por elección sino porque la vida lo llevó a eso, podemos
rescatar algo importante de lo que dice, el rock nuestro va a triunfar cuando
dejemos de copiar y le metamos lo nuestro, no debe ser guacharaca, no debe ser
acordeón sino lo nuestro.
El reto entonces es muy importante ¿Cómo hacer que nuestro
rock sea nuestro sin disfrazarlo de cumbia y de folclor? Mucha gente lo ha
logrado, uno de los ejemplos que siempre coloco es el disco ROOTS de SEPULTURA
en donde todos los elementos de la batucada están presentes de manera
impresionante pero no deja de ser rock, contrario a lo que sucede en Colombia
en donde ya hemos llegado incluso al extremo de sobreponerle a la música carrilera
pura las letras de los Rolling Stones. Entonces les dejo la conversación en
LAMC (Un fragmento) para que siga este debate sobre la identidad del género en
la música popular, recordándoles siempre que muchos no estamos en la música por
ser famosos o vender discos, sino por construir identidades con ella.